martes, 23 de abril de 2013

Evitar que Argentina se convierta en Venezuela


Una de las banderas más elevadas, según mi consideración, el 18A, fue evitar que “Argentina se convierta en Venezuela”.
La oposición por derecha se siente muy identificada con esta bandera. Y, me da a pensar, también Hermes Binner. El candidato a presidente del Frente Amplio PROGRESISTA siente más simpatía por el representante de la derecha Venezolana (también de otros sectores, pero, priman sectores de derecha, y, los otros sectores que componen el frente, “no les molesta” juntarse con ese impresentable para lograr sus objetivos), Henrique Capriles, que por el mismísimo Hugo Chavez, por tildarlo de Populista, Dictador, y Antidemocrático. (Mismas recriminaciones que se le acusan a Cristina Kirchner).
Si hacemos la reiterada analogía, podemos suponer que, si las variables de la política en Argentina decantasen en formar un frente opositor con un único candidato, que sea Mauricio Macri (análogo a Henrique Capriles), Binner apoyaría dicha candidatura.
Si Capriles fuese argentino, y fuese candidato de la oposición a Cristina, prefiero 20, 30 o 50 años más de Kirchnerismo. Y hasta militaría con fusil y metralleta, su permanencia.
Si mis conjeturas son correctas, y lamentablemente cada vez creo más que es así, Hermes Binner no me representa en absoluto.

“Que Argentina no se convierta en Venezuela”. Si seguimos con esta oposición, estamos en ese camino. Muchos dicen que tenemos que juntarnos para ganarle al Kirchnerismo. Yo digo NO. Si nos juntamos para ganarle al Kirchnerismo sin importarnos el programa, la coherencia política y el objetivo socialista, caeremos en ser como Venezuela, solo que, sin el Chavismo y con el Kirchnerismo, lamentablemente.

El objetivo tiene que ser claro: El Socialismo. Si no lo querés, no sos progresista.
No me identifico con el 18ª, que fue una marcha de bronca egoísta, cuyo espíritu es “no me toquen mas el culo, tóquenselo a mi vecino”.
No me identifico con la clase media de esta ciudad, que es lamentable.
No me identifico con que “en la política todo vale”
Y, como tampoco me identifico con apoyar “el mal menor”, tampoco soy oficialista.
Libres del Sur es el partido político más coherente, más adaptado a mi forma de pensar en lo ideológico. Un partido que siempre, históricamente apuntó alto, con perfil bajo, para ser funcional a cambiar el país para mejor. Siendo siempre vapuleado en los cierres de listas, siendo una fuerza grande a nivel nacional, con muchísima militancia y muchas personerías, tiene una representación política insignificante cuantitativamente, pero inmejorable cualitativamente.  
Pero la estrategia adoptada este año, me da a pensar más en una reacción juvenil de “ya estoy cansado de ser nada, y de nunca llegar a nada”, que en una decisión madura y coherente.

No somos Uruguay. No somos el Frente Amplio. Y el Kirchnerismo tampoco es el Partido Colorado.
Parece que soy un Paria. No me gusta serlo y no quiero serlo. Antes formaría mi propio partido.